Javier San Pedro Ortega es natural de Laguardia y enólogo por tradición y vocación. Procede de una familia de viticultores, siendo la quinta generación de la familia que elabora sus propios vinos con uvas procedentes de sus viñedos, ya que la familia San Pedro posee más de 100 hectáreas de viñedo en el término de Laguardia.

Es en la vendimia de 2013, tras ocho años aportando su toque personal a los vinos de la bodega familiar, cuando decide emprender su proyecto personal.
En la gama Viuda Negra, pretende recuperar viejos viñedos de la zona obteniendo la máxima calidad de cada parcela.

Una bodega innovadora y con un joven equipo buscando sorprender y diferenciarse del clásico vino de Rioja.
Crianza: Elaborado con viñas de más de 20 años que producen uvas de piel más dura y mosto más concentrado, resultando un perfil de vino más mineral y complejo. Nunca Jamás: La filosofía de Nunca Jamás es la de un vino que no quiere crecer, buscando así la complejidad en la fruta, se vendimian las zonas altas de cada viñedo, las más pobres. Por su espíritu joven, la etiqueta de este vino se reinventa cada año en manos de diferentes personas. La Taconera: Es el primer viñedo que compré y fue plantado en 1921. Fue una viña maltratada que costó 4 años recuperar y poder comenzar la elaboración de este personal vino, 0.4 Has que se vendimian con el máximo cuidado en cajas y se desgrana cada racimo de manera manual. Villahuercos: Es un viñedo de 0.9 Has localizado en la falda de Sierra de Cantabria, a unos 600 metros de altura. Esta gran altura aporta al vino frescura y una mayor acidez que otorga una mayor longevidad a este especial vino blanco. Prado de las Almas: Era un viñedo que nos daba mucha potencia aromática pero no el volumen necesario para elaborar tintos. Estas caracteristicas son ideales para producir un vino rosado muy fresco pero pensado para alcanzar gran longevidad.