FRANCISCO BARONA, 3a generación de viticultores, viaja a Burdeos y alli se licencia en viticultura y enología. En 2010 comienza a desarrollar una idea, recuperar viñedos centenarios de la Ribera del Duero. EL COMIENZO. En 2011 compra 5 majuelos de cepa vieja, en 3 pueblos distintos. VITICULTURA. Cuenta con 26 hectáreas de cepa vieja, 28 GRAND CRUS plantados entre 1908 y 1948. Cepas de Tinto Fino conviviendo en armonía con garnachas, valencianas, monastreles, albillos y jaenes. Se trabaja siempre de forma ecológica y respetando los ritmos cósmicos. No se utilizan herbicidas ni plaguicidas químicos, el uso de azufres y cobres es muy limitado. La viña utiliza sus propios sistemas naturales de defensa para combatir las enfermedades, ayudándola cuando lo requiere con preparados naturales de plantas como la valeriana, ajo, ajenjo, manzanilla, espliego, salvia, cola de caballo, ortiga o canela. El suelo se mantiene con cubierta vegetal y sin arar hasta el verano, lo que permite aumentar la vida de éste y mejorar la nutrición de la planta. Las cepas se trabajan con la mayor vegetación posible lo que permite que los racimos maduren a la sombra, consiguiendo mayor acidez y mejor equilibrio en los vinos. En el mes de Agosto se realiza una selección de racimos, retirando de la cepa aquellos que van retrasados en la maduración. FINCA LAS DUEÑAS: Edición limitada de 1.118 botellas. La parcela del mismo nombre y dónde se originan estas sabrosas y finas uvas se encuentra cerca de Anguix, en un viejo viñedo de 1908 plantado en vaso sobre un suelo de arena, arcilla y cal. Aunque predomina el Tinto Fino, de un clon de tallo rojizo, piel fina y sabores intensos muy raro de encontrar en Ribera, hay también un porcentaje importante de Bobal y Albillo que juegan además un papel notorio en la elaboración de este vino. Fermenta en barricas nuevas de roble francés con el racimo entero sin despalillar y con sus propias levaduras. En las mismas barricas hacen la maloláctica y posterior crianza durante 20 meses.